La plata coloidal es una solución acuosa, con nanopartículas de plata suspendidas en ella. Es un poderoso antibiótico de amplio espectro. Elimina virus, bacterias, hongos, parásitos.

Al contrario que los antibióticos convencionales, no destruye la flora benéfica, ni afecta hígado o riñones.

Combate parásitos, cándidas, herpes, fatiga crónica, estafilococos, estreptococos, herpes zoster y más de 600 afecciones virales y bacterianas.   Puede usarse oralmente o como tópico. 

Se utiliza para enjuagues bucales, infección de ojos y conjuntivitis. Heridas abiertas, quemaduras y pie de atleta.

Refuerza el sistema inmune aumentando los globulos blancos. 

Mejora la digestión y actúa como reconstituyente general del organismo.

Regenera las células. Elimina las cancerígenas

 Depurativo sanguíneo e intestinal.

USO Y DOSIFICACIÓN:

La ingesta recomendada es de una gota por kilo de peso (80 kg., 80 gotas), dividida en dos tomas diarias. Esta dosificación deberá mantenerse inicialmente durante dos semanas y luego, si se desea, se puede reducir a la mitad. 

Durante la ingesta del coloide de plata, es normal (y deseable) que puedan darse síntomas de crisis depurativas (diarrea, fiebre, expectoración, mucosidad, fatiga, estados gripales, etc) como consecuencia de su efecto. Dichas crisis suelen ser breves (2 o 3 días) y remiten espontáneamente si garantizamos el adecuado reposo y la correcta hidratación. 

Una semana después de finalizar la ingesta, el efecto protector se desvanece, ya que los coloides de plata son eliminados de los tejidos por medio de los riñones, intestinos y linfa. 

También puede aplicarse en gotas nasales y oculares (un par de gotas en cada ojo) en caso de conjuntivitis o irritación y en topicaciones sobre la piel (acné, verrugas, heridas, quemaduras) con el auxilio de gasas. Se pueden hacer buches por un minuto para la flora bucal.